Su objetivo como misionero es enseñar a las personas a fin de que puedan venir a Cristo por medio de las ordenanzas del bautismo y la confirmación. A medida que las personas a quienes usted enseñe abran el corazón, escuchen el mensaje y obedezcan los mandamientos de Dios, sentirán el Espíritu del Señor, y, al sentirlo y al actuar de acuerdo con la inspiración que reciban, se convertirán. Usted puede ser un instrumento en la conversión de las personas valiéndose del proceso que se conoce por el nombre de modelo de compromiso. Para emplear dicho modelo, ante todo, debe preparar a las personas para que puedan sentir el Espíritu. Una vez que lleguen a sentir el Espíritu, usted les invitará a hacer y guardar los compromisos que se encuentran en las charlas misionales. Al aceptar ellos sus invitaciones, usted hará las verificaciones necesarias para ayudarles a cumplir con los compromisos que ellos hayan contraído. Si el investigador expresara ciertas dudas durante este proceso, usted le ayudará a resolverlas. Entonces la persona estará en mejores condiciones de hacer los compromisos que le llevarán a la conversión y cumplir con ellos.
